Jefe, un café!

En el programa de anoche: Tengo una pregunta para usted en tve, la televisión de todos, una representación de ciudadanos preguntaban a Zapatero cuestiones que les preocupaban. La pregunta que ha tenido más repercusión ha sido :¿Cúanto vale un café en la calle?, según Zapatero unos 80 céntimos. Ha sido la respuesta más corta y directa de ZP, ya que se trajo infinidad de respuestas preparadas desde casa, pero se le olvidó el café.

Dentro de la página de Nacho Escolar descubro que ya se ha creado una wiki del asunto, ¿Cúanto vale un café?, ¿cúanto pagas tú?.Mira si ya aparece tu ciudad y el bar al que acudes cada día para disfrutar de tu chute diario!
Me despierta la curiosidad saber dónde se toma el café nuestro presidente.

-Voy a seguir trabajando, pero antes : ¡Jefe, un café!-

¿Juegos divertidos?

Domingo. Día primaveral. Soleado exterior. Interior: escena de sofá con manta incluida, sssssh!comienza la película. Y le dimos al play, comenzaba Funny Games del director austríaco Michael Haneke. Esta película no es ninguna película de estreno ni siquiera del año pasado, simplemente es una película que había decidido no ver nunca y aún así lo he hecho.

“Cada uno ve en mis películas lo que lleva dentro”, dixit Michael Haneke.
Malestar.Violencia.Violencia gratuita.Violencia mediática. Violencia psicológica. Violencia física. Se abre el debate: ¿el ser humano es malo por naturaleza?El intento de acudir a la filosofía a buscar respuestas no hace sino abrir la veda para que aparezcan más preguntas.
Creo haberme sentido violentada, después de haber consumido tanta violencia. Y engañada, ya que el director llega a cambiar el curso de la película con numerosos trucos.
Sinopsis.La película muestra como una pareja de treintañeros tortura a una familia burguesa: un matrimonio con un hijo y un perro. La muerte es algo que se hace esperar durante toda la cinta. Llama la atención la tranquilidad de los jóvenes que se dedican a torturar a la familia y la frialdad de la familia ante algunas situaciones.
Los planos fijos se alargan en el tiempo.
Haneke utiliza los trucos tan manidos de las películas del género del thriller, añadiéndole su toque de violencia donde lo más importante es lo que no se muestra. Lo mejor que le podría ocurrir a la familia es que la película hubiera durado tan sólo 10 minutos.

Lo llamativo de la cinta no sólo es la crueldad de
la historia, sino la manera de introducir al
espectador en la historia dirigiéndose
directamente a él con guiños y preguntas
explícitas.

¿Finalidad? Haneke critica la violencia mediática que consumimos sin que nos atormente. La mayoría de los casos de violencia que consumimos proceden de historias lejanas en los telediarios y de películas, que vemos como si se trataran de ficción.Por ello el director nos quiere contar una historia introduciéndonos directamente en ella al ser un suceso que ocurre a una familia y al dirigirse al espectador.Asimismo, muestra a los personajes como seres normales, quitando que su modo de diversión principal es esta clase de juegos. ¿Pero Haneke, hacía falta recrearse tanto en la crueldad?

-lo que tengo claro es que los próximos telediarios que vea causarán más impacto sobre mi persona, pero a los pocos días volveré a acostumbrarme a comerme la violencia de los medios con papas o con lo que tenga para comer, como todos los días-

¿Quién pertenece a quién?

Algo me hace incorporarme del sillón, ¿es él?,¿es su voz?: es su Preámbulo a las instrucciones para dar cuerda al reloj.
No imaginaba escuchar un relato de Julio Cortázar dando forma a un anuncio de un coche.

Si te quedas con ganas de tener un reloj, aquí tienes las instrucciones para dar cuerda al reloj- que pertenece al libro Historias de Cronopios y Famas (1962).

Allá al fondo está la muerte, pero no tenga miedo. Sujete el reloj con una mano, tome con dos dedos la llave de la cuerda,remóntela suavemente. Ahora se abre otro plazo, los árboles despliegan sus hojas, las barcas corren regatas, el tiempo como un abanico se va llenando de sí mismo y de él brotan el aire, las brisas de la tierra, la sombra de una mujer, el perfume del pan. ¿Qué más quiere, qué más quiere?Átelo pronto a su muñeca, déjelo latir en libertad,imítelo anhelante. El miedo herrumbra las áncoras, cada cosa que pudo alcanzarse y fue olvidada va corroyendo las venas del reloj, gangrenando la fría sangre de sus rubíes. Y allá en el fondo está la muerte si no corremos y llegamos antes y comprendemos que ya no importa.

-y yo con estos pelos y sin reloj-

Presentaciones

Sòc la paperera//Soy la papelera
...y quedaron presentadas
Paseaba despistada por la estación. La luz amarillenta cubría a todos los que allí estaban.
Se sentó en uno de los bancos de la estación junto a una señora que leía un libro, gordo y amarillento. Ese libro parecía una novela histórica de esas en las que se dan la mano la belleza, el lujo y el poder. En cambio ella parecía encontrarse en el lugar antagónico de aquel libro.
Levantó la vista y un objeto inanimado se le presentó. Sonrío, después de que nadie le hablara en todo el día. Sòc la paperera, soy la papelera dijo por si ella no pudiera comprenderla.
Ella también le dio su nombre y así quedaron presentadas.

-de regreso a los textos infantiles; mención especial al cuento que escribí en mi niñez que no era otra cosa que el diálogo de la tiza y la pizarra-siempre juntas, aunque no por ello siempre amigas.

La despertà!

ATENCIÓN: las ondas procedentes de los juegos con pólvora se acercan

La despertà...Vaya forma de despertarse por la mañana, pensarán algunos, otros nisiquiera tienen la necesidad de dormir para luego despertarse.
Para entenderlo un poco hay que estar allí, no os asustéis no es Vietnam, son los petardos que marcan el comienzo de la jornada, a las 8 de la mañana, de las Fallas de Valencia. El ruido precede al chocolate y los buñuelos que abren el día.

-dedicado a las señoritas juglares que como en cuento se conviertieron en falleras. Para algunas todo hoy ha vuelto a la normalidad. Allí quedó nuestra fallera mayor que verá como hoy día de San José se queman las fallas, disfruta de la Cremà.-

Voces sociales

Desde el seminario de periodismo digital en el que me he visto inmersa esta semana en Barcelona no ha dejado de hablarse de internet y de nuevas tecnologías relacionadas con la web.

Por supuesto, no ha dejado de repetirse día tras día el concepto de web 2.0, la web actual dónde sin participación y cooperación nada sería posible. Esta segunda generación se basa en servicios para los usuarios, lo que provoca el nacimiento de las redes sociales, aplicaciones como flickr-para fotografías- o la wikipedia-enciclopedia libre en la que los lectores editan las entradas- . Todo ésto apoyado en un sistema de servicios, programas y contenidos gratuitos alimentados por los que conformamos el mundo de internet.

Josep Maria Ganyet, uno de los ponentes ha abierto un debate que me ha parecido interesante sobre el término web 2.0. ¿Hablamos de web 2.0 o deberíamos hablar de web 0.2? Para comprender esta cuestión debemos remontarnos al inicio de internet. Tim Berners-Lee junto a Robert Cailleau crearon en 1990 la World Wide Web en el Consejo Europeo para la Investigación Nuclear (CERN) en Suiza. Internet nació como un medio para compartir datos científicos a nivel internacional. Un espacio gratuito y para todos. Por tanto resulta un tanto paradójica la terminología utilizada para la web actual,web dónde se desarrolla la idea inicial del sentido de internet- término relacionado directamente con las versiones sobre la red, siempre en constante evolución.-

Desde el nacimiento de la www se han ido sucediendo cambios que han posibilitado este nuevo tipo de uso de la red. La fuerza de la web 2.0 somos nosotros, nuestra voz es aquí importante, creamos las informaciones, las publicamos, las vinculamos, comentamos...

Esto ha llevado, a su vez, a un cambio en la información periodística. Ahora se habla de periodismo participativo, de web 3.0, los ciudadanos tienen voz, gracias a la interactividad de los medios digitales.

No te quedes callado.

-y pocos fueron los que callaron (...) -

Vivía dentro de una burbuja

--Sólo necesitaba un soplo de aire para darle vida, el mismo soplo que podía romperla.--
Ella había decidido vivir dentro de una burbuja. Cuando conseguía el aire suficiente para volar, era feliz y conseguía disfrutar de las vistas.
Era el único lugar habitable que conocía, el mismo lugar que en ocasiones se volvía inhóspito.
Cuando era habitable, la burbuja transformaba su casi etéreo material en un material de una naturaleza indestructible. Pero esa

transformación, ese cambio de naturaleza, podía cambiar si se sucedían demasiados días grises, demasiados días vacíos, o si los seres volátiles

-aquellos que hacían a la burbuja más habitable- estaban alejados durante demasiado tiempo.

Ahora que se le sucedían los días grises la burbuja ha vuelto a ser del frágil material etéreo, ha variado su tamaño, y al volverse más pequeña respirar dentro de ella resulta costoso. La posición que ocupa ella dentro es tan agobiante que le gustaría tomar el poco aire que hay dentro para romperla de un golpe y respirar con naturalidad. El único problema es que ella no sabría vivir fuera de la burbuja y, tal vez, debería aprender a hacerlo.

Poco a poco va perdiendo el sentido... -demasiados suspiros para tan poco oxígeno-.

Los otros seres volátiles creen oír su respiración entrecortada. Comienzan a soplar. Poco a poco parece que la burbuja no se desvanece. Poco a poco retoma altura, la altura suficiente para poder volver a disfrutar de las vistas.